Modelo de Policía de Proximidad Social y Comunitaria

El diseño de rutas críticas y acciones para la implementación del Modelo de Policía de Proximidad Social y Comunitaria de Insyde se enmarca dentro de un proceso amplio de adecuación institucional que aporta los canales de eficiencia necesarios para contribuir a reducir la vulnerabilidad y mejorar la calidad de vida de los habitantes de las comunidades locales a través de la promoción de la seguridad ciudadana y la reproducción de prácticas policiales sustentadas en el reconocimiento de las necesidades del ciudadano.

Al modelo de policía de proximidad social y comunitaria se le ha dado nombres tan distintos como policía de cuadrante, policía de barrio o gestión de policía, pero la finalidad principal con la que ha venido asentándose en decenas de países alrededor del mundo ha sido una sola: superar el abordaje tradicional —de tipo coercitivo y reactivo— de la actuación policial por otro que, sin descuidar lo anterior, pone el acento en la acción preventiva, proactiva y de colaboración con otros actores sociales como la vía más efectiva para enfrentar el incremento en los niveles de violencia y de inseguridad.


Pero además, este Modelo de definición del trabajo policial promueve una política de colaboración intra e interinstitucional que hoy es vital para la buena gobernanza local. En primer lugar, porque incluye a la policía como actor clave del diseño integral de políticas preventivas y de proximidad con la comunidad. Es decir, la saca del aislamiento en el que se le ha y se ha mantenido con respecto al trabajo de colaboración y coordinación intrainstitucional y la obliga al diálogo con diversas instancias municipales, estatales y federales en la definición de metas institucionales. Pero también porque contribuye a que otros actores institucionales comprendan, desde una perspectiva de derechos, el importante rol que juega la policía en la generación de entornos seguros, habitables y libres de violencia, y que asuman conjuntamente la importante tarea de generar sinergias entre la política sociales y de seguridad para su concreción.

Por todo lo anterior, este modelo también promueve la metodología POP (Problem-Oriented Policing / función policial orientada a la solución de problemas), que es fundamentalmente una estrategia de análisis de los problemas comunitarios y que parte de que la solución a los mismos estará dada por el contexto. El POP no estandariza la respuesta, sino que promueve un cambio de mentalidad y requiere policías proactivos con capacidad de análisis y una mirada estratégica en el trabajo policial.


El interés y la promoción de Insyde hacia esfuerzos de esta naturaleza encontraron cabida en la alianza que se estableció en 2012 con el Programa para la Convivencia Ciudadana de la United States Agency for International Development (USAID) y que permitió, desde mediados de ese año poner en marcha intervenciones en Tijuana, Ciudad Juárez y Monterrey.

Además, en los últimos años Insyde ha tenido la oportunidad de participar de la mano con municipios como Toluca, Guadalajara, Nogales, San Luis Potosí y Tlaxcala, realizando trabajo intenso de participación ciudadana y de proximidad.

Como parte de los resultados más exitosos de este proyecto, vale destacar la publicación de la guía “Policía Comunitaria: Conceptos, métodos y escenarios de aplicación” (link a la publicación), tanto en su versión impresa como electrónica, así como el documento “Herramientas Básicas. Policía Comunitaria: Conceptos, métodos y escenarios de aplicación” (link a la publicación), que es una síntesis de lo más destacado de la guía.